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Semáforo naranja, última llamada para PyMEs que aún no se han digitalizado

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La poca posibilidad de realizar actividades y la lenta reapertura sigue poniendo a prueba a los negocios para seguir reinventándose y digitalizándose 

De conformidad con la información compartida por las autoridades federales, actualmente, son 16 los estados de la República en una fase operativa naranja. Esto significa que, aunque se ha avanzado en la activación de algunas actividades, las reglas de operación no son las mismas y la apuesta de los negocios por su digitalización e inclusión tecnológica debe seguir siendo prioridad.

Frente a este panorama, para los pequeños y medianos negocios ha quedado claro que el proceso de transformación y adaptación continúa”, comentó Julien Blaise, Head de Marketing en QuickBooks. “Esta etapa ha sido un breve -y posiblemente insuficiente- respiro y ha resultado clave para definir su actuar en los siguientes meses. Es momento de que los dueños de negocios dejen de esperar la posibilidad de volver a operar como antes lo hacían y, en su lugar, continúen reinventándose y auxiliándose de las herramientas que les permiten existir en este nuevo modelo y seguir operando con éxito”, concluyó.

De este modo, el semáforo naranja no significa una entera reapertura, sino la oportunidad de incorporarse a sus actividades de forma paulatina y estratégicamente planificada, con nuevas medidas que les permitan seguir operando. Frente a estos retos, QuickBooks, plataforma líder en administración y facturación, destaca algunas particularidades de la operatividad en esta etapa, para que pequeños y medianos empresarios puedan estar preparados y continúen impulsando la prosperidad en su negocio durante esta modalidad. 

Reorganización de prioridades

Según la información oficial, durante esta etapa, prestadores de servicio y productos de mediana escala no deben operar a más del 30% de su capacidad. Esto impone la necesidad de hacer un recorte definitivo de aquellos recursos que ya no son requeridos y, así, trasladarlos a sus nuevas necesidades. De entre ellas, la inversión en nuevos canales de venta digital, software que facilite el trabajo remoto y llevar el control financiero del negocio de forma digital, completamente remota y organizada para la toma inteligente de decisiones.

Seguridad, la nueva máxima

Además de planear un presupuesto para equipo de protección sanitaria y evitar que puedan incurrir en penalizaciones administrativas, la seguridad de la información en su negocio también debe ser prioridad. Por eso, ahora que hay una mayor apertura a probar canales digitales de operación, además de permitir mayor ubicuidad y orden al alcance de sus manos, éstos deberán ofrecer la seguridad de que su información y, posiblemente, la de sus clientes y proveedores se mantiene protegida y bien respaldada.

Altas y bajas a la vista

Un aspecto crucial es entender que aún no hay nada seguro para los siguientes meses. Incluso, se tiene el riesgo de que haya un retroceso al semáforo rojo y con ello la necesidad de otro cierre. Pero esto no significa que no se pueda pensar en el futuro y anticiparse.

Actualmente, a través de plataformas tecnológicas como el Planificador de Flujo de Efectivo de QuickBooks, disponible de forma gratuita en su micrositio, los dueños de pequeños y medianos negocios ya pueden hacer proyecciones y decidir de forma más acertada los movimientos que mejor convengan según el comportamiento real de los gastos e ingresos de su negocio hasta por los próximos 90 días.

Ahora que los dueños y emprendedores saben que este es un periodo en el que la incertidumbre es la única constante, deberán enfocarse en hacer de todos los recursos a su alcance una oportunidad. Esto significa acostumbrarse a echar mano de herramientas, como QuickBooks, que de una forma fácil y ágil les permite tomar el control en todo momento y lugar.

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